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¿Por qué manipularon a la población a través del miedo?

Según la psicóloga clínica Lourdes Relloso, lo que invalida a un ser humano está en su mente:

El miedo es el arma más potente en una guerra psicológica […]  si yo genero miedo y el miedo es algo que colapsa, que hace que una persona se quede atenazada, sin capacidad de reacción o la reacción que tiene es la que yo quiero porque yo meto el estímulo para tú huyas, entonces el miedo es una arma invisible, pero es la más poderosa…

Tenemos dos miedos clarísimos con los que se está jugando, es el miedo a morir, el miedo a enfermar, el miedo a contagiar a los nuestros. Luego tenemos el miedo a ser rechazados, a ser denostado, a ser desacreditados… se juega con el lenguaje. Cuando yo utilizo palabras mordaza: negacionista, antivacunas… de alguna forma lo que yo estoy haciendo es que las personas que pueden tener un criterio discordante, tienen miedo a hablar porque a lo mejor se le crucifica socialmente. Entonces, lo que tenemos es una sociedad que tiene miedo a morir o enfermar o a contagiar, que están totalmente llevados desde ese miedo, sin darse cuenta es un poco lo que se utiliza en las artes marciales, su propia fuerza… yo simplemente les dejo vayan al abismo.

Y hay otros que a lo mejor están pensando, dudando, no están del todo de acuerdo y tampoco son presas de ese miedo, pero como yo ya estoy amenazándoles de alguna manera con que si dicen cualquier cosa que cuestione mi solución aplicada, van a ser denostado socialmente… estas personas callan.

Tenemos que evidenciar el nuestro rechazo más absoluto, decir la palabra, el lenguaje es la acción. Es justamente lo contrario del miedo, tenemos que tener el coraje de expresarnos libremente, tenemos que romper el miedo a ser crucificados por los demás, tenemos que jugar exactamente el mismo juego en el que yo no tengo miedo a que tú me descalifiques con tu palabra mordaza, en realidad nuestra fortaleza es la unión, es la fusión y es el respeto […] la energía más potente, la más importante es el amor, el antídoto mejor contra el miedo es el amor, el amor por uno mismo y que yo no tengo que complacer al mundo y yo soy capaz de respetarme a mí mismo.

El amor al prójimo que me ayuda a respetar la decisión que cada uno tenga que tomar, la unión de todo ese pueblo respetándose absolutamente, es nuestra mayor herramienta y esto es lo que tenemos que hacer, vencer sin combatir: pero por supuesto teniendo el coraje de expresar que no vamos a aceptar cualquier condición, no tenemos miedo. Tenemos que comportarnos como si no tuviéramos miedo, porque evidentemente el ser humano no puede no tener miedo, pero tenemos que comportarnos como si fuéramos capaces de tocar ese miedo. Porque cuando actúas como si no tuvieras miedo lo vas perdiendo.

Por eso para ellos es tan importante que las medidas se mantengan, aunque no haya lógica para la medida. Cuando tú tienes a toda una población que se comporta de una determinada manera, les estás sugestionando en que no actúen y al mismo tiempo estás manteniendo el estado de alerta y el miedo… cada vez que tú ves a una persona con una mascarilla te recuerda que hay un peligro.

Luego, se mantiene el estado de alerta, se mantiene el miedo. Si tú ves a la gente sin mascarilla, de repente ese miedo que te estaban inoculando parece cómo si desapareciera. El arma más poderosa que tienen, es nuestro miedo.

En el momento en que empiezan a ver que hay personas que hablan, que a pesar de la consecuencia: hablan, que a pesar de las palabras mordaza: hablan, que a pesar de que el otro le rechace: hablan, que a pesar de perder privilegios: hablan.

Cuando ven que todo el mundo empieza a dejar de tener miedo a expresarse, empiezan ellos a tener miedo, porque su única arma, la única que realmente tienen es nuestro miedo, el arma con la que juegan está en nuestros cerebros. En el momento que nosotros empecemos a tocar el miedo y empecemos a superarlo, hemos ganado. Esta guerra está dentro de nosotros, si nosotros podemos vencer nuestros miedos, hemos ganado…      

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